Cuando ya te hayas ido con el aire del olvido
preguntaré a los fantasmas de memorias apresadas
imaginando acaso fueras el amor querido
¿cómo combatiré al tiempo... y la distancia?
Cuando ya te hayas ido doquiera que tú has venido
lágrimas emocionadas, premoniciones frustradas
repetición incesante de interrogantes ansiadas
recurrentes como olas de pasión y de nostalgia.
Desde el mar que me acompaña avasalla la esperanza
presentida con certeza de cruel paradoja incierta
sorprendente y misteriosa la vida sigue y espera
en uno y mil horizontes que se extienden a tu vera.
Y no obstante que el presente es dulzura de quimera
surge el fantasma y pregunta con crueldades hilarantes
terquedades inconstantes, reticente interrogante
cuando ya te hayas ido...
¿cómo combatiré al tiempo y la distancia?
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